lunes, julio 27, 2009

Opinión del coordinador de Transporte sobre cambios implementados

¿Cuál es el problema de que el Concejo Deliberante haya decidido formular una Ordenanza que lleva el Nº 1.844/2009 que retrotrae la implementación de un sistema de semaforización tendiente a asegurar y ordenar la transitabilidad por calle Pasteur en su intersección con avenida Juan Domingo Perón?
Los criterios fundamentales son dos:
1. De admitirse el fracaso, la principal consecuencia es el desaliento social y el costo político del gobierno de turno en cuanto a su credibilidad.
2. De NO admitirse el fracaso, la consecuencia es aún más peligrosa. El Concejo Deliberante se verá tentado a «mentir» y «esconder bajo la alfombra», situación que ya ha ocurrido en épocas anteriores, generando estériles discusiones sobre el número de accidentes y la inacción para evitarlos.
Antes de pensar en admitir los giros a la izquierda en los semáforos de las avenidas y calles de la Ciudad y prohibir los estacionamientos, conviene averiguar cuales son los objetivos que se ha propuesto la actual Administración sobre la planificación Urbana de la Ciudad.
Armonizar todo el sistema de tránsito es un gran desafío. La ciudad no debe ser replanteada en base al parámetro vehicular, sino todo lo contrario, en base al peatón, con su conjunción bicicleta, ciclomotor y transporte público.
La tecnología de los semáforos ha avanzado mucho; tanto es así, que el número de las fases de un semáforo está determinado principalmente por el tratamiento que se dé a los giros a la izquierda. Hay que tener en cuenta las condiciones en las que se realizan estos giros, ya que el sistema de semaforización en conflicto debe coordinarse con otro sistema que prohíbe los giros por una Avenida principal como es Av. San Martín y peor aún, sumar otro volumen vehicular a calle Pasteur proveniente de calle Moreno.
Con el sistema de semaforización (fases) implementado anteriormente:
* Se evitan casi totalmente los accidentes por no girar a la izquierda (al menos por calle Pasteur).
* Se reducen los riesgos para los demás accidentes (peatones / bicicletas / ciclomotores / vehículos).
* Se moderan las velocidades, porque los vehículos se acumulan a la entrada de la intersección.
* Se ordena el tránsito, brindando seguridad de traslación a todos los actores de la circulación vial.
Otra cosas son los usos y costumbres arraigados en los Ciudadanos, tanto para NO querer dar una vuelta manzana y no respetar la señalización. Pero eso es harina de otro costal que rebasa toda técnica.
Por estas razones, entre otras, es muy importante que el Concejo Deliberante extreme cuidados en la fijación de este tipo de Ordenanzas. En definitiva están «condicionando», el accionar del futuro político de turno y lo que es peor, la implementación y seguimiento de una verdadera POLÍTICA DE ESTADO en cuestión de SEGURIDAD VIAL
Pablo Fernando Arcieri
Coord. Transporte Seguridad Vial

Osteoporosis: Usted puede hacer la diferencia (Parte I)

La capacidad de reconocer y controlar los factores de riesgo es la piedra angular de la medicina moderna. Por ejemplo, el manejo de la presión arterial y el colesterol en suero elevados ha ayudado a revertir el número creciente de muertes a causa de enfermedad cardiovascular y parálisis cerebral en países desarrollados. Esto es, en principio, porque la gente adopta el ejercicio, las dietas sanas y, en algunos casos, los medicamentos, para ayudar a reducir el colesterol en sangre y la presión arterial.
La osteoporosis puede combatirse de un modo similar.
La osteoporosis es una enfermedad crónica y debilitante en la que la masa y calidad de los huesos se va deteriorando. Éstos se vuelven porosos y frágiles, el esqueleto se debilita, y el riesgo de fracturas aumenta considerablemente. La pérdida se produce “silenciosamente” y progresivamente, sin síntomas aparentes hasta que ocurre la primera fractura, en particular en la muñeca, columna o cadera. Las fracturas por osteoporosis afectan negativamente la calidad de vida y causan dolor, disfunción y, en el peor de los casos, la muerte. No debe subestimarse el impacto de la enfermedad en los familiares, quienes deben dedicar tiempo y energía para ayudar a un miembro de la familia que carece de autonomía.
Alrededor de una de cada tres mujeres mayores de 50 años sufrirán una fractura por osteoporosis (más que cáncer de mama) así como también uno de cada cinco hombres mayores de 50 años (más frecuentes que cáncer de próstata).
Los años claves para el desarrollo de la masa ósea son durante la niñez y la adolescencia. En ambas etapas, la formación de hueso nuevo es más rápida que la remoción de hueso viejo, con lo cual, los huesos se vuelven más grandes y densos. Este ritmo continúa hasta los veinticinco años aproximadamente cuando suele alcanzarse el pico de masa ósea (densidad ósea máxima).
En general, la pérdida de tejido óseo comienza después de los 40 años.
En las últimas décadas, los médicos e investigadores han recabado mucha información sobre diversos factores de riesgo para las osteoporosis.
Muchos de esos factores pueden ser reducidos mediante la acción individual, pero los que no pueden ser reducidos mediante cambios en el estilo de vida pueden, sin embargo, ser disminuidos a través de otras medidas tendientes a aumentar la salud ósea.

Factores de riesgo modificables: 1. Alcohol, 2. Tabaquismo, 3. Bajo índice de masa corporal, 4. Mala alimentación, 54. Trastornos alimenticios, 6. Escaso ejercicio, 7. Baja ingesta de calcio en la dieta, 8. Deficiencia de vitamina D, 9. Caídas frecuentes.

Factores de riesgo fijos: 1. Edad, 2. Sexo femenino, 3. Antecedentes familiares, 4. Fracturas previas, 5. Raza / Etnia, 6. Menopausia / Histerectomía, 7. Tratamiento prolongado con glucocorticoides, 8. Hipogonadismo primario / secundario en hombres.
Dr. Norberto Quagliato
Médoco Reumatólogo
Centro Médico Dr. Rivero Covre