Fue un 17 de octubre que el pueblo ganó las calles y llenó la Plaza de Mayo pidiendo por el hombre que desde ese día sería el guía y líder de las masas trabajadoras y de los necesitados de nuestro pueblo: Juan Domingo Perón.
La conformación del Movimiento Nacional Justicialista cambiaría para siempre la historia del país. Las premisas claras de Justicia Social, Independencia Económica y Soberanía Política, perduraron en el tiempo.
Este histórico acontecimiento fue denominado día de la “Lealtad”. Lealtad de un pueblo hacia su líder. Hoy, a tantos años de ese día, los Peronistas seguimos conmemorando el día de la Lealtad.
Como militante Peronista me pregunto: ¿Lealtad a quién?, ¿a una doctrina?, ¿a un pensamiento?, ¿a un hombre?
Hoy nos encuentra a los Peronistas sin conducción, con un movimiento atomizado y sin sentimiento militante.
Hoy el Peronismo es tierra fértil para cualquier improvisado, corrupto o personalista que sobrepone a los hombres por encima del movimiento; y la mayoría de los autodenominados militantes no son más que mercenarios de la política, que se mueven de acuerdo a sus conveniencias y del “Quien pone más”.
¿Quién representa hoy al Peronismo?, ¿los Peronistas K?, ¿quién?
Por eso debemos volver al partido como verdadera representación política, por sobre los hombres que dicen representarlos. Para que en años venideros podamos decir, soy leal a una doctrina, a un pensamiento, a una nueva forma de hacer política, agiornada a los tiempos que nos toca vivir.
Hoy el mayor logro del Peronismo es que el que no piense como nosotros pueda tomar nuestras ideas y gobernar con ellas, de no ser así nos convertiríamos en absolutos de nuestra doctrina y ese no es el objetivo final del peronismo sino, de acuerdo a esas ideas, liberar al hombre de las opresiones que sufre.
Gobernar para el pueblo, es luchar por su bienestar.
La conformación del Movimiento Nacional Justicialista cambiaría para siempre la historia del país. Las premisas claras de Justicia Social, Independencia Económica y Soberanía Política, perduraron en el tiempo.
Este histórico acontecimiento fue denominado día de la “Lealtad”. Lealtad de un pueblo hacia su líder. Hoy, a tantos años de ese día, los Peronistas seguimos conmemorando el día de la Lealtad.
Como militante Peronista me pregunto: ¿Lealtad a quién?, ¿a una doctrina?, ¿a un pensamiento?, ¿a un hombre?
Hoy nos encuentra a los Peronistas sin conducción, con un movimiento atomizado y sin sentimiento militante.
Hoy el Peronismo es tierra fértil para cualquier improvisado, corrupto o personalista que sobrepone a los hombres por encima del movimiento; y la mayoría de los autodenominados militantes no son más que mercenarios de la política, que se mueven de acuerdo a sus conveniencias y del “Quien pone más”.
¿Quién representa hoy al Peronismo?, ¿los Peronistas K?, ¿quién?
Por eso debemos volver al partido como verdadera representación política, por sobre los hombres que dicen representarlos. Para que en años venideros podamos decir, soy leal a una doctrina, a un pensamiento, a una nueva forma de hacer política, agiornada a los tiempos que nos toca vivir.
Hoy el mayor logro del Peronismo es que el que no piense como nosotros pueda tomar nuestras ideas y gobernar con ellas, de no ser así nos convertiríamos en absolutos de nuestra doctrina y ese no es el objetivo final del peronismo sino, de acuerdo a esas ideas, liberar al hombre de las opresiones que sufre.
Gobernar para el pueblo, es luchar por su bienestar.
Bordón Rubén
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